Bueno, pues allá vamos con la primera entrada del temario de
Literatura Infantil.
El primer día de clase, la profesora nos preguntó que cómo íbamos con
la Literatura y que cómo se nos daba y eso… y no puede evitar contestarle
“fatal…”. Esto es porque durante toda mi vida, he estudiado la historia de la
Literatura con sus autores y obras correspondientes, lo cual nunca se me ha
dado bien de estudiar… pero en esta asignatura vamos a hablar, como dije en mi
presentación, de la Literatura Infantil.
¿A QUÉ LLAMAMOS
LITERATURA INFANTIL?
Pues bien, para empezar con buen pie, debemos hacer una introducción
donde definir la Literatura Infantil, pero Irune, nuestra profe, nos ha
propuesto hacerlo por separado: por un lado la definición de Literatura como
tal y, por otro lado, la definición de Infantil.
Para poder definir la Literatura hemos estado varias clases sacando,
entre todos, sus principales características:
·
La función del lenguaje que más presente está en
la Literatura es la poética, la cual se utiliza cuando se busca la belleza y el
mensaje oral o escrito se cuida especialmente. Pero esto no significa que no
utilice las demás funciones del lenguaje, sino que ésta predomina por encima de
las otras.
·
Por ello, podemos decir que su única función es
la estética, lo artístico.
·
Se basa en la FICCIÓN y esto se ve en la simulación
de la realidad que realizan las obras literarias
cuando presentan un mundo imaginario al receptor. Aquí habría que mencionar la
subjetividad, pues cada receptor le da un significado distinto a las obras.
Llegados a este punto, hay que hacer una distinción entre la
Literatura y la Paraliteratura, pues comparten una serie de características
(función poética del lenguaje), pero a los textos paraliterarios les faltan
aspectos para llegar a ser completamente literarios. Un ejemplo de ellos pueden
ser los diarios, las biografías,… estos textos, sin embargo, están basados en
la REALIDAD, y tienen otro tipo de objetivos prioritarios por encima de los
estético, como enseñar,…
Además de estos dos movimientos, también está la Subliteratura, la
cual tiene un fin u objetivo totalmente distinto al de la Literatura y la
Paraliteratura, que es ganar dinero. Para ello, los autores se adaptan a las
distintas necesidades de la sociedad para poder obtener un mayor número de
lectores.
Con esto, podemos concluir diciendo que la Literatura es el arte de la
palabra o a través de ella.
En cuanto a la definición de Infantil, podemos decir que es la
siguiente: aquello que abarca hasta los 12 años de edad. Pero esta distribución
de edades, quien las marca realmente son las editoriales y la primera en hacer
esta división fue SM.
Por todo ello, podemos afirmar que la Literatura Infantil es el
arte de la palabra destinada a niños de hasta 12 años de edad. Es aquella
Literatura que está hecha pensada en los niños, en sus interese, sus gustos,…y debe
ser hecha para que los niños disfruten leyendo.
En clase, cada uno de nosotros ha buscado alguna definición y algunos
han puesto en común la que han encontrado. Antes de hablar de las definiciones
de las cuales hemos hablado, expondré la definición que yo he encontrado:
“La Literatura Infantil es
aquella que va dirigida hacia el lector infantil, más el conjunto de textos literarios que la sociedad ha considerado aptos para los más pequeños, pero que en su origen se
escribieron pensando en lectores adultos (por ejemplo Los viajes de
Gulliver, La isla del
tesoro o Platero y yo). Podríamos definir entonces la literatura infantil como aquella que
también leen niños. En otro sentido del término, menos habitual, comprende
también las piezas literarias escritas por los propios niños.”
En mi opinión, esta definición no tiene ni pies ni cabeza. Por un
lado, estoy de acuerdo en lo primero que dice de que va dirigida hacia el
lector infantil pero, si he entendido bien, cuando dice “Aquella que también
leen los niños” quiere decir que cualquier libro/cuento leído por un niño es
Literatura Infantil. ¿Podemos decir, entonces, que la saga Crepúsculo es
Literatura Infantil por el mero hecho de que los niños tienen acceso a ella?
Por supuesto que no, ya que la Literatura Infantil, como he comentado antes,
debe ser escrita teniendo en cuenta al niño, sus gustos e intereses y la saga Crepúsculo
no es de su incumbencia
¿ALGUNAS
CARACTERÍSTICAS MÁS IMPORTANTES DE LA LITERATURA INFANTIL?
Como siempre hacemos, buscamos nosotros en casa cosas para ver qué es lo que realmente sabemos y después, en clase, lo ponemos en común.
Yo encontré una página donde Perry Nodelman, a través de su libro Los Placeres de la Literatura Infantil (1992), clasifica y define una serie de características de la Literatura Infantil.
Nodelman estaba especulando e invitando a un debate sobre las maneras de definir la Literatura Infantil como un género, no el argumento de que estas características hacen siempre definir el género.
Dichas características son las siguientes:
·
Simple
y directa. Esto no quiere decir que el vocabulario tiene que ser
simplista o que el estilo debe ser agitado ni que debe ser una Literatura
plana.
·
Se centra en la acción. Sutiles eventos
psicológicos son a menudo implícitos a través de la narración.
·
Se hace una literatura acerca de la infancia.
·
Es optimista. “La esperanza es una dimensión
fundamental de un libro para niños” (Sarah Smedman).
·
Tiende hacia la fantasía. Esto implica que, a
menudo, haya un desafío de nuestro conocimiento de la realidad y representa el
potencial que yace bajo la superficie de cada uno de nosotros.
·
Es una forma de celebrar las alegrías y la
inocencia de la vida rural cerca de la naturaleza y en compañía de amigos.
·
Vistas de un mundo sin idílico desde la
perspectiva de la inocencia. Los libros más complejos e interesantes reflejan
la ambivalencia de la aventura, el deseo de ser inocente, el deseo de crecer,
etc.
·
Es didáctico. Tradicionalmente, la Literatura
Infantil ha sido vista como un intento de educar a los niños. Un tema transversal
es enseñar a los niños que, a pesar de su aburrimiento, su casa es un lugar
mejor para estar que en el peligroso mundo exterior.
·
Tiende a ser repetitiva. La repetición de tareas
es un método básico de la educación. Es un rasgo común de la literatura oral.
Las repeticiones con variaciones de palabras, frases, situaciones y patrones
narrativos son comunes en la Literatura Infantil.
·
Tiende a equilibrar el idílico campo
problemático. Algunos libros son casi totalmente didácticos (enseñan cómo llegar
a ser como los adultos, maduros y tratar con el mundo de los adultos) o
idílicos (lo que refleja el deseo de conservar la inocencia de la infancia),
pero la mayoría de los libros tratan de combinar los dos enfoques y trata con
ideas opuestas, tales como el hogar frente a la distancia, la preocupación
comunitaria contra el interés propio, el bien contra el mal,…
¿CUÁLES SON LAS
PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS QUE DEBE TENER UN LIBRO DE LITERATURA INFANIL PARA
NIÑOS DE ENTRE 0 Y 6 AÑOS?
·
Para empezar, tras comparar y analizar las
diferencias entre Literatura Infantil y Literatura Adulta, debemos decir que la
primera debe estar adecuada al pensamiento de los niños y debe ser asequible
cuanto a vocabulario, formato y forma. Por eso debe atender a sus gustos, sus
necesidades evolutivas y a su momento evolutivo.
·
Tema: interesante para los niños y adecuado a su
edad, es decir, que se sientan identificados con dicho tema y lo entiendan.
·
Personajes: deben ser adecuados y reconocibles a la edad del niño, es decir, personajes
que caractericen roles de la vida cotidiana como mamá, papá, abuelitos,… estos
pueden representarse tanto en personas como en animales incluso en objetos.
·
Protagonista: como hemos dicho antes, debe ser
reconocible y como hablamos de la Literatura Infantil, lo ideal es que sea un
niño. Tiene que reflejar el momento evolutivo del niño.
·
Estructura: debe ser simple, es decir, debe
tener un planteamiento, un nudo y un desenlace. La hay de dos tipos: lineal (la
cual puede ser también acumulativa, es decir, un planteamiento con acción, un
nudo acumulativo en el que la acción se repite continuamente con distinto
animal y un desenlace. Aquí podemos resaltar el libro A qué sabe la luna)
y circular (el punto en el que acaba es el de inicio, pero con otro personaje).
·
Contexto: reconocible y adecuado a la edad del
niño.
·
Lenguaje/estilo: adecuado y reconocible por el
niño. Sencillo pero no simple. No debemos privarles de la calidad artística por
el hecho de que sean niños. Esto no es sólo referente al vocabulario, es decir,
también es válido a las frases y su estructura: deben ser cortas y pueden tener
una (máximo) subordinad; las oraciones deben ser simples morfológicamente
hablando con un verbo como máximo. En cuanto a los diálogos, deben ser
adecuados a los personajes, es decir, si el principal personaje es un niño, el
vocabulario debe ser el de un niño y no el de un adulto.
·
Imágenes: lo que debemos tener en cuenta es que
lo que a nosotros nos guste no tiene por qué gustarle a los niños y tenemos que
darle, ante todo, variedad.
·
Formato/edición: como hemos dicho varias veces
ya, debe ser también adecuada a su edad, es decir, el libro tiene que ser fácil
de manejar, por lo que deben ser páginas manejables, grandes y gruesas. Estaría
bien también que tuviera gran variedad de colores y texturas, pues así pueden
jugar con él.
·
Valores: la Literatura Infantil actual no busca
moralizar al niño, lo que busca es que el niño disfrute y sea feliz leyendo o
escuchando estos cuentos.
·
Debemos atender a los finales: la historia puede
empezar con un planteamiento negativo y acabar con un desenlace positivo, o
empezar de forma positiva y acabar también de forma positiva.
Con todo esto, podemos concluir diciendo que si encontramos un libro
que cumple todas estas características, se trata de un libro adecuado para los
niños de Infantil.
HABLEMOS, AHORA, DE
LAS CARACTERÍSTICAS DE LOS CUENTOS SEGÚN LA EDAD Y LA ETAPA DE DESARROLLO DEL
NIÑO
Aquí voy a hacer referencia a unos documentos que nos ha facilitado
Irune sobre las características de los cuentos dependiendo de las edades y de
la etapa de evolución del niño, pues este es un punto muy importante a tener en
cuenta.
- De 0 a 2 años: hay que tener en cuenta que, con esta corta edad, no leen. Exploran el mundo a través de los sentidos y aprenden gracias a las vivencias concretas con la realidad. Los cuentos que mejor asimilan con esta edad son aquellos que suministran experiencias auditivas y visuales, los que lo invitan a participar activamente con el movimiento físico de quien narra y quien escucha, aquellos cuentos con ritmo y rima, aquellos que incluyan repeticiones, sonidos interesantes,… Ejemplos de ellos son las nanas, los cuentos con juegos de manos y la manipulación del cuerpo, álbumes (sobre esto hablaré un poquitín más abajo), cuentos sin textos,…
- De 2 a 5 años: esta etapa cobra mayor importancia, pues es una etapa de prelectura donde el niño comienza a desarrollar el lenguaje oral, empieza a desarrollar su capacidad de narración,… En esta etapa es donde el niño entra en la etapa de representación preoperatoria, donde el niño comienza a construir símbolos, tiene una inclinación por la interpretación “mágica” de la realidad, donde empieza a construir sus conceptos a través de la manipulación directa, donde aumenta de forma vertiginosa su vocabulario; se trata de una etapa donde el niño es egocéntrico en cuanto a su interpretación de la realidad. Les interesan cuentos que introduzcan conceptos simples de forma, color, tamaño,..., cuentos que le permitan identificar objetos, cuyo eje sea un niño como él, con una trama acumulativa y algo más compleja. Ejemplos de ellos son libros de folclore sencillo, cuentos simples y repetitivos, libros ilustrados, libros de láminas con historia,…
- Por último, de 5 a 7 años: en esta etapa ya los niños poseen una lectura comprensiva donde se usan textos cortos con una lectura silábica y por palabras. Se encuentran en una etapa intuitivo donde el niño experimenta terrores personales normales, desarrolla el concepto de identidad individual y su autoestima, donde tiene una vida imaginativa rica y abundante que le ayuda a entender lo real, donde ha desarrollado el concepto básico de la narración y la observación, y donde tiene un concepto de moralidad absoluto. En esta etapa, los libros que más les interesan son aquellos que le permitan al niño trabajar sus propios temores, cuentos que le hablen de la importancia del individuo, aquellos que le presenten finales felices y justos y que le permitan desarrollar su capacidad para percibir detalles,… Ejemplos de esto son cuentos clásicos europeos o cuentos de animales, fantasía o de hadas. (FOTO)
Antes de acabar este apartado, creo conveniente hablar de un tipo de
libro de Literatura Infantil, pues lo he nombrado anteriormente. Este tipo de
libro se llama álbum de imágenes o álbum ilustrados.
Este tipo de libro combina la escritura con la imagen, dos lenguajes
que se interrelacionan para resolver un texto ya sea narrativo o poético. Este
género va más allá de la noción didáctica dirigida a niños o a jóvenes lectores
y rompe con las limitaciones que se ejercen sobre los autores e ilustradores en
su creación.
El libro álbum destaca la función estética, la interrelación de la
imagen con la grafía y la rica posibilidad del libro objeto; le exige al lector
vincular todo a través de la imaginación y de la interpretación de los
elementos que lo conforman para comprender lo que se dice. Esto solicita una
lectura compleja.
Con la llegada de este género, se crearon nuevos formatos de lectura
y, por ello, los libros que parecían limitados a un público lector infantil o
juvenil pueden dirigirse a lectores de otras edades.
BREVE HISTORIA DE LA
LITERATURA INFANTIL
Sólo podemos hablar de
Literatura para los niños a partir del siglo XVIII, pues hasta entonces no se
tenía cuidado con los temas que usaban para los cuentos o libros que les leían
y no se hacían atendiendo a sus gustos y su momento evolutivo, sino que se
hacían con temas de la sociedad sin ningún tipo de pudor (violencia, sexo,
enfermedades, injusticias,…)
En esos tiempos, la
lectura estaba bastante cara, por lo que no todos los niños podían disfrutar de
la calidad literaria. Saturnino Calleja y sus hijos inventaron una nueva forma
de hacer literatura más asequible donde los libros eran bastante más baratos:
papeles de peor calidad, más finos y pequeños, una impresión y una
encuadernación peor,... estos son los llamados “libros de bolsillo”.
Es entre finales del
siglo XVIII y principios del siglo XIX cuando, por fin, se empieza a escribir
realmente para el niño, es decir, cuando se estudian sus gustos, sus intereses
y su momento evolutivo.
Pero esta literatura no
es la Literatura Infantil tal y como la conocemos hoy en día, es decir, se pensó
que sería conveniente pensar en el niño (gustos y momento evolutivo), pero esto
no se llevó a cabo. Los personajes eran planos y no tenían una psicología real,
por lo que los niños no se sentían identificados con ellos. El objetivo de esta
Literatura era moralizar y educar.
Para que la Literatura
Infantil tuviera una mayor calidad se hizo una modernización de las ideas
educativas impulsadas, especialmente por la Institución Libre de Enseñanza (una
entidad creada en 1876 en Madrid e inspirada en las ideas krausistas).
Con estos cambios, ya
en el siglo XX, se empezó a escribir Literatura Infantil para niños (pero cuando
decimos “niños”, nos referimos a chavales de unos 10 o 12 años, pues a los niños más pequeños no se les tiene en
cuenta en la Literatura hasta los años 90).
Aquí podemos hablar de Elena
Fortún, autora de libros expresamente para los niños, ya que tiene en cuenta
sus gustos, sus intereses y su momento evolutivo; los libros de Celia
cuentan la historia de una niña de 7 años llamada Celia Gálvez de Montalbán que
pertenecía a la alta burguesía madrileña y que tenía una actitud propia de su
edad. (FOTO). Este es uno de sus títulos más conocido, aunque tiene alguno más
como Lita y Lito o El Mago Pritulo. Además de una gran escritora,
sus obras son bastante adecuadas para los niños porque entendió bastante bien
las necesidades de los niños para con la Literatura y hacía que los niños se
sintieran identificados con los personajes y, con ello, que disfrutaran de la
Literatura.
Ya en los años 60, la Literatura
Infantil comienza a perder su carácter didáctico y moralizante y se empieza a
hacer Literatura para los más pequeños (como he comentado antes, niños de 10 o
12 años).
En los años 70 surge una nueva
forma de educar a los niños y aparece la escolaridad obligatoria. Los
personajes en esta época eran tiernos y disparatados. Predomina la fantasía y
la multiculturalidad.
En los años 80 existe una vía
libre en las editoriales, por lo que tienen total libertad para publicar los
libros que les parezca convenientes.
Más tarde, en los años 90, se
retienen los cambios y hallazgos literarios creados en los 70. En esta época se
tratan temas como el aborto, la multiculturalidad, las drogas,… es aquí donde
se crean nuevos tipos de libros como pueden ser, por ejemplo, los libros para
no lectores y los libros-juego.
Hoy en día se tiene clara la idea
de que los personajes de los cuentos o libros tienen que tener una personalidad
con la cual los niños lectores puedan verse identificados con ellos. Esto es un
punto muy importante, pues antes se trataba al niño como un adulto en miniatura
y ahora, sin embargo, se le trata como lo que es: un niño.
EVOLUCIÓN DE LOS
PERSONAJES
La opinión de los autores sobre
los niños varía según la época:
A finales del siglo XIX y
principios del siglo XX el modelo que se ofrece de niño es básicamente el
adulto en miniatura, pero con aspectos fáciles de reconocer por el niño, como
por ejemplo la familia. Calleja propone un niño bueno, estudioso, responsable,…un
niño ejemplar.
Más tarde, durante la preguerra,
el modelo de niño que se propone es el del niño sumiso. El día de mañana serán
niños temerosos, no querrán separarse de sus padres, maestros, de sus mayores,…
serán niños con complejo de culpabilidad ante cualquier decisión difícil que se
plantee a lo largo de su vida, niños angustiados que tienen que responder como
adultos, que tienen sus mismo deberes.
Durante la posguerra, el modelo
de niño que parece es el niño travieso, ya que en esta época aparece Antoñita
la fantástica, la cual ya no es la típica niña buena, sino que es una niña
real, de carne y hueso que tiene aspectos tanto positivos como negativos.
Más tarde, aparece el modelo del
niño travieso-ejemplar, y es gracias a un libro con mucho éxito en España
llamado Marcelino Pan y Vino de José Mª Sánchez Silva.
En la década de los 60, el modelo
que aparece es el del niño rebelde, como se ve en El Polizón del Ulises
de Ana Mª Maute. El protagonista es un niño rebelde que se reserva su
personalidad para él mismo, guarda cuidadosamente su intimidad.
Y, por último, a finales de los
años 70 y en la década de los 80, aparece el modelo de un niño más
independiente con la capacidad suficiente para hacerse oír entre los demás. Un
claro ejemplo aparece en La ciudad que tenía todo de Alfredo Gómez
Cerdá.
Mercedes Gómez del Manzano
escribió El protagonista niño y el niño lector en la Literatura Infantil del
siglo XX. Este libro dio una vuelta al concepto de personajes. En él
aparece la evolución de los personajes y se define al protagonista infantil de
tal manera que el niño lector se pueda identificar con él, es decir, tiene unas
características, unos gustos e intereses y un momento evolutivo iguales que los
niños lectores.
Esta sería la evolución de los
personajes durante el siglo XX en España. El cambio es brusco: desde el niño
bueno incapaz de hacer las cosas por sí mismo, a un niño autónomo con
personalidad suficiente para poder afrontar cualquier situación que se plantee.
Como conclusión, la Literatura
plasma la sociedad del momento, pero también actúa como sistema de modelo, es
decir, que ofrece modelos, tipos que el niño puede imitar.
¿ALGUNOS NOMBRES
INTERESANTES?
·
Juan Cervera (1984) un escritor con gran
conocimiento acerca de la Literatura Infantil, que tiene en cuenta al niño, es
decir, tiene en cuenta sus gustos, sus intereses, sus pensamientos, su evolución
psicológica, su psicología evolutiva, su lenguaje,… en sus obras. En cuanto a
su definición de Literatura Infantil, dice que en ella se integran todas las
manifestaciones y actividades que tienen como base la palabra con finalidad
artística o lúdica que interesen al niño. (FOTO )
·
Luis Carroll, un escritor clave en el siglo XX,
conocido sobre todo por su obra Alicia
en el país de las maravillas y su secuela, Alicia a
través del espejo. Sus temas y personajes son absurdos y extraños,
poco reales. Se podría considerar fantasía pero no lo es, pues es más bien
obras sin sentido, del absurdo. (FOTO)
·
Marisa Bortolussi (1985). Su definición de
Literatura Infantil es la siguiente: “la obra destinada a un público infantil”.
Me parece una definición bastante acertada, es decir, es corta pero intensa. En
pocas palabras expresa todo lo que hemos estado diciendo hasta aquí, pues al
decir “destinada a un público infantil, supongo que quiere decir que hay que
tener en cuenta sus gustos. (FOTO)
¿ALGUNOS AUTORES
IMPORTANTES EN LA LITERATRA INFANTIL?
Hablemos, a continuación, David
McKee, Jean de Brunhoff, Violeta Denou.
·
David McKee es un escritor e ilustrador
británico conocido, especialmente, por la creación de la serie de Elmer,
el elefante de colores inspirado en la obra de Paul Klee (FOTO). Comenzó a
dibujar tiras cómicas para diarios y revistas aún antes de terminar la
universidad. Tiene un estilo de ilustración con una sencillez aparente, aunque
en varias de sus obras incluye referencias y guiños a la historia presente,
además de relatos paralelos de los que la narración no habla, pero que sí
pueden seguirse en las imágenes. En sus obras podemos encontrar influencias de
Steinberg y André François.
·
Jean de Brunhoff, escritor e ilustrador francés
conocido por ser co-creador de Babar, un elefante protagonista de una serie de
libros infantiles publicados por primera vez en 1931. La historia fue
originalmente contada por su esposa, Cecile de Brunhoff a sus hijos Laurent y
Mathieu. Publicó siete títulos en total. Sus obras son las siguientes: A.B.C.
de Babar (1936), Babar y Papá Noel (1940), Babar y sus hijos
1938, La Historia de Babar (1934), Los viajes de Babar (1934) y Las
vacaciones de Zefir (1937). (FOTO)
·
Violeta Denou, seudónimo de tres ilustradoras:
Asunción Esteban, Carlota Goyta y Anna Vidal.
Creadoras de los libros de Teo, con más de 150 títulos traducidos a más
de 15 idiomas. Como consecuencia de este triunfo, ha recibido varios premios
internacionales de Literatura Infantil. A lo largo de los 30 años cumplidos de
Teo, ha formado parte de la vida de los más pequeños ayudándoles en su
crecimiento y aprendizaje, desde los primeros meses de vida hasta los 7 años de
edad.
Las historias
giran alrededor de Teo, un niño simpático y curioso que ayuda a aprender
valores a los más pequeños, sintiéndose identificados con sus aventuras
diarias. (FOTO)
Pero… ¿TODA LA LITERATURA
INFANTIL ES IGUAL? No, como ya sabemos, la Literatura Infantil (al igual que en
la Literatura de adulto) se distinguen tres géneros: lírico, prosa, y drama.
La mayoría de los libros están
escritos en prosa; en cuanto al teatro, no existe dicho género en
la literatura infantil (ya que una misma persona es muy difícil que haga varios
personajes, cambiando sus voces y demás, sino que serían necesarias varias
personas para hacer esto); pero sí para representar en niños de infantil (sí
hay libros para adultos para representar a niños). Con lo que respecta a la
poesía, existe una poesía lírica, la cual expresa los sentimientos (pero no los
de los niños, sino los sentimientos de los padres, por lo que no despertaba el
interés de los niños) y otra poesía épica, que narra historias de héroes y
dioses.
Aquí hay que hablar de una gran
autora, Gloria Fuertes.
Buscando en Internet sobre su
vida, Wikipedia nos dice lo siguiente: “asistió al Instituto de Educación
Profesional de la Mujer, pero sus aficiones eran muy diferentes a las propias
de las mujeres de su época. Su interés por las letras comenzó a la temprana
edad de cinco años, cuando ya escribía y dibujaba sus propios cuentos. Empezó a
escribir versos a los catorce años, a los quince los leía en Radio España de
Madrid y a los diecisiete dio forma a su primer libro de poemas (Isla
ignorada) que sería publicado en 1950.”
Personalmente, me considero
alguien que se crió con las obras de Gloria Fuertes, aunque no siempre las
entendía… Ella marcó un antes y un después en la Literatura Infantil, buscó una poesía que se escribiera
pensando en lo que interesa verdaderamente al niño e introduciendo el tema del
absurdo, siempre estando presente el humor.
En vez de decir los libros más significativos de Gloria Fuertes, diré
los libros que tengo en casa de cuando era niña. Estos son los siguientes:
Poesías para todos los días. Versos fritos, Gloria Fuertes os cuenta
cuentos de animales, ¿Qué será, será? Preguntas y respuestas, Poesías,
rimas y disparates. Pienso mesa y digo silla, Acertijos, chistes y
canciones. Chupachús.
Cuando la profe me diga que está perefecto (;)) subiré unas fotitos de
los libros para que veáis que de verdad los tengo en mi poder! Jajaja
Hasta la próxima entrada! =) (que será pronto, pues tengo que subir la
actividad del mismo tema).
WEBGRAFÍA, MATERIAL
COMPLEMENTARIO Y ENLACES DE INTERÉS
Apuntes de clase.
Cuadro de referencia de las características de los libros según las edades y el momento evolutivo del niño.
Cuadro de referencia de las características de los libros según las edades y el momento evolutivo del niño.
Perfecto.
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