lunes, 26 de febrero de 2018

BORRADOR BLOQUE 1: LENGUAJE, LENGUA Y COMUNICACIÓN ORAL

Y aquí estoy otra vez, 6 años más tarde, tratando el mismo tema tan apasionante. Pero esta vez para niños más mayores, los de Educación Primaria.

La primera entrada de esta asignatura es para trabajar la Comunicación Oral en gran grupo, un aspecto súper importante en el desarrollo de nuestros alumnos.



Muchas veces se pasa de largo este punto, no se le da la suficiente importancia, ya que se da por hecho que al hablar el idioma saben comunicarse correctamente. No se hace hincapié en la manera en la que nuestros alumnos se comunican entre ellos y es que una incorrecta adquisición de la comunicación oral puede traer dificultades o problemas en su futuro.

La propuesta de esta entrada es trabajar la Comunicación Oral de los alumnos a través de una conversación controlada por diálogo, en la que los alumnos expondrán sus opiniones acerca de la pregunta “¿Crees que la música te ayuda a crecer?”.

Actualmente, con la LOMCE, la música en las escuelas está apartada. La Educación Artística y la Música se consideran “asignaturas específicas” optativas que podrán ser cursadas “en función de la regulación y de la programación de la oferta educativa que establezca cada Administración educativa y en su caso de la oferta de los centros docentes”.

Es decir, si una determinada comunidad decide no ofertarla, o si deja esta decisión a los centros educativos y estos no la ofertan, los alumnos no tendrán ni la posibilidad de elegirla como optativa en los 10 años de su educación obligatoria. La educación musical puede desaparecer si no se modifica este proyecto de ley.

Resulta difícil comprender cómo la música (una actividad que genera tanta riqueza cultural y de tan alto nivel formativo) es ignorada en nuestro sistema educativo.

Yo considero la música como un lenguaje simbólico y universal que hace posible la expresión de las emociones más profundas. Este gran recurso didáctico hace referencia a la gran diversidad lingüística de todo el mundo, diversidad que deberíamos preservar.

Por eso, voy a plantearles a los chicos de 6º de Educación Primaria este diálogo. La LOMCE entró en vigor en el curso escolar 2014-2015, donde estos alumnos cursaban en 3º de Primaria. Esto quiere decir que cursaron la materia durante 1º y 2º.

Creo que es un tema bastante apropiado para trabajarlo con ellos porque:
  1. Es una materia que han cursado años anteriores, por lo que saben a lo que se refieren cuando hablan.
  2. Es un tema del que todos pueden hablar ya que todo el mundo (se quiera o no) escucha música en algún momento de su vida (y la disfruta, ¡espero!).
  3. Porque hay mucha variedad en gustos y opiniones sobre la música. Ya sabéis lo que dicen... sobre gustos no hay nada escrito.
Bajo la pregunta de “¿Crees que la música te ayuda a crecer?”, mi objetivo es crear un diálogo en el que cada alumno dé su opinión sobre la importancia de dar música en el colegio o no, todo en un ambiente relajado y de escucha que favorezca el que puedan hablar con libertad sin sentirse juzgados, coartados o en un error.

Para ellos, muchas veces la materia de Música es simplemente tocar la flauta o cantar algunas canciones sin más; mientras que para otros es algo más, es una herramienta de comunicación, de expresión de sus sentimientos más profundos, o su manera de hablarle al mundo.

Por ello, me encantaría poder escuchar la opinión de cada uno de los alumnos sobre este tema.

La actividad se realizará en la clase donde, tanto los niños como yo, nos sentaremos en círculo para que todos podamos vernos los unos a los otros y podamos, a través del contacto visual, realizar un seguimiento más significativo de lo que dicen nuestros compañeros.

La temporalización será de una hora o una hora y media, según vaya desarrollándose el diálogo.

Por supuesto, antes de empezar la actividad, recordaré las normas que hay que cumplir para que se pueda llevar a cabo un diálogo enriquecedor. Se les avisa a los alumnos de que si esas normas no se cumplen, el diálogo podría quedar interrumpido sin poder terminar esta actividad.

Las normas son las siguientes:
  1. Respetar a la persona que está hablando.
  2. Hablar con un tono adecuado (ni gritando, ni tan bajito que no nos oigan nuestros compañeros).
  3. Saber escuchar (a todos nos gusta que nos presten atención).
  4. Respetar las opiniones de los demás. Si tenemos algo que decir sobre su punto de vista, podemos levantar la mano y contestar a esa persona.
  5. Vamos a intentar no tener conversaciones a parte con otro compañero, si tenemos algo que decir, lo decimos en alto para que otros puedan escucharme.
Por supuesto, cada vez que vea que sea necesario, estas normas serán recordadas para poder mantener un clima óptimo de diálogo.

Pues… ¡MANOS A LA OBRA!

Para poner en situación a los alumnos, comienzo la sesión poniendo una canción (lo ideal sería haber hecho un sondeo previo y poder ponerles una que yo sepa que les haga sentir “algo”) proponiéndoles que escriban en una hoja lo que la canción les ha evocado: qué han sentido al escuchar esta canción, qué harían si no pudieran escuchar nunca más música, etc.

Me encuentro en este supuesto práctico con un alumno que no respeta, no escucha y habla continuamente para imponer su punto de vista. Por ello, le propongo entregarle una función, la figura de mediación. Su tarea consiste en llevar un orden (escrito) de los turnos de palabras según sus compañeros van levantando la mano para exponer sus ideas. En el caso de que sea él mismo quien quiera participar, ha de apuntarse; pero sólo puede apuntarse una vez cada cinco compañeros. Es decir, que sólo puede hablar cada vez que hayan dado su puesto de vista cinco compañeros más.

Como sé que hay un alumno que no participa en las actividades habladas grupales, esta parte introductoria de la actividad le ayudará a sentirse seguro con sus argumentos y tener una base en la que apoyarse para poder participar posteriormente. Si a pesar de tener esta base no le interesa o no quiere participar, se le ofrece agruparse con un compañero para que, aunque sea en pareja, participe y su compañero le ayude a exponer.

Una vez han escrito algo todos pasamos al diálogo. Empiezo yo para romper un poco el hielo comentando lo que ha hecho sentir a mí esa canción. Después, les pregunto si ellos han sentido algo parecido o algo totalmente diferente.

En base a eso, seguimos el diálogo avanzando y profundizando en el tema de la importancia o no de la música para nuestro propio desarrollo.

El moderador debe cumplir su función y yo, como parte externa del diálogo, intentaré que el mediador haga lo que tiene como función y que el otro alumno que no suele hablar participe.

Toda la sesión será grabada por audio y será reproducida en otra sesión con el fin de que ellos mismos evalúen su propia participación.

En cuanto a la evaluación de cada alumno, me guiaré por este cuadrante:



ALUMNADO
ÍTEMS
ALUMNO 1
ALUMNO 2
ALUMNO 3
ALUMNO ...
Ha escuchado la canción con atención




Ha mantenido la calma en el diálogo




Ha mantenido una escucha activa




Ha contestado a alguna intervención de algún compañero




Ha mantenido un volumen de voz adecuado para el diálogo




Ha aportado su punto de vista




Ha superado la vergüenza/ miedo escénico*




Ha sabido mantener una actitud de moderador adecuada**






*este ítem es para el alumno que no suele hablar en gran grupo
**este ítem es para el alumno que no respeta, no escucha y habla continuamente para imponer su punto de vista